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SALUD GENITAL

La atrofia vaginal tras la menopausia

La atrofia vaginal tras la menopausia
Marta Cabrera Benito
Última actualización: 8 Noviembre 2016
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El 50% de las mujeres parecerán atrofia vaginal tras la menospausia a causa de la falta de estrógenos, no debemos ignorar este problema.

Durante la menopausia, la mujer experimenta distinto cambios en su cuerpo que le hace darse cuenta de que algo está cambiando. Muchos son los síntomas que pueden darse con la menopausia, como los sofocos, pero existen otros que no son tan evidentes o que cuesta reconocerlos. La atrofia vaginal es uno de esos síntomas que pueden pasar desapercibidos, aunque hay ocasiones en las que una mujer no le pone remedio por la vergüenza que le produce este trastorno.

La atrofia vaginal es un trastorno que se produce cuando la mujer ve disminuido el nivel de estrógenos. Estos son la principal hormona sexual femenina. Cuando están presentes en menor cantidad hacen que la vida sexual de la mujer se vea altamente afectada ya que influyen en el óptimo estado de la vagina para poder tener relaciones sexuales.

Pareja de más de cincuenta añosMantener una vida sexual activa previene la atrofia vaginal

Alrededor del 50% de las mujeres padecen o padecerán atrofia vaginal durante la menopausia, por ello, al primer síntoma lo mejor será acudir al médico especialista que pueda diagnosticar con certeza el trastorno hormonal.

Influencia de la atrofia vaginal en la sexualidad

La sexualidad es una de las más perjudicadas cuando una mujer padece atrofia vaginal y no se trata o aún está con el tratamiento en proceso. Perjudica hasta el punto que hay mujeres que prefieren no tener vida sexual por falta de interés por los problemas y dolores que le ocasiona, es una de las grandes causas de disfunciones sexuales en una mujer. Cuando una mujer llegar a la menopausia y tiene atrofia vaginal va a tener problemas en las relaciones sexuales por cuestiones como la falta de lubricación. Es uno de los efectos más inmediatos y frecuentes de la atrofia vaginal y que afecta directamente a la sexualidad. De este derivan otro como el dolor o malestar a la hora de tener relaciones sexuales. Al no haber suficiente mucosa, la fricción que realiza el pene contra las paredes vaginales puede llegar a producir pequeñas heridas o lesiones por la falta de lubricación.

Los médicos recomiendan tener una actividad sexual bastante regular. Esto ayuda a que las paredes vaginales no pierdan la misma elasticidad que tendrían en caso de que la mujer no tenga relaciones sexuales. En el caso de que la mujer no tenga sexo en su vida, por la razón que sea, siempre puede utilizar dilatadores vaginales que harán el mismo efecto y servirán igualmente de ayuda.

A los síntomas relacionados con la sexualidad hay que añadir que es posible que la mujer pueda sentir incontinencia urinaria y dolor a la hora de orinar.

Diagnóstico y tratamiento de la atrofia vaginal

Antes de nada, una mujer ha de tener claro que tener atrofia vaginal es algo común, es más, el 50% de las mujeres pasa por ello durante la menopausia e incluso en otras fases de su vida y, por lo tanto, a la menor sospecha de que algo no va bien, lo más recomendable será acudir al médico sin pensar en que da vergüenza o que no es importante.

Mujer médicoConsulta con tu médico sobre la atrofia vaginal y no lo tomes como algo poco importante

Una vez vaya la mujer al ginecólogo, éste le preguntará sobre los síntomas que ha tenido para ver si pueden estar relacionados, por la edad y hábitos que tenga en su día a día. Una vez que el especialista cree que puede ser un caso de atrofia vaginal, pasará a hacer una exploración a la mujer. Ayudándose del espéculo inspeccionará las paredes vaginales para ver en qué estado se encuentran al igual que cogerá una muestra de secreción vaginal para evitar cualquier tipo de infección. También es posible que la paciente tenga que hacerse una analítica de sangre para medir los niveles de estrógenos en sangre para poder confirmar, de esta forma, el diagnóstico.

Una vez que se sabe que la mujer tiene atrofia vaginal, habrá que establecer el grado en el que se encuentra el trastorno para que éste sea tratado de una manera u otra. En el caso de las atrofias más leves, bastará con utilizar hidratantes y lubricantes vaginales. Los hidratantes se utilizarán de igual manera que utilizamos cremas para hidratar el resto del cuerpo. Se usarán de forma de habitual haciendo que las paredes vaginales dejen de estar tan sensibles al roce. En el caso de los lubricantes, su uso será en los momentos previos a tener relaciones sexuales. Sustituirán a la lubricación que debería segregar la propia mujer y que ahora mismo no hace. Con ellos se conseguirá que la penetración no sea tan molesta y dolorosa como lo era hasta ahora.

Los casos más severos recibirán un tratamiento hormonal que busque sustituir los estrógenos que han desaparecido del organismo de la mujer. Pueden ser administrados en parches o en comprimidos. Los resultados no suelen hacerse esperar, ya que su efectividad hace que los síntomas de la atrofia vaginal vayan reduciéndose.

Los médicos también recomiendan que la mujer que tenga este trastorno siga unos hábitos de vida lo más saludables posibles. Es recomendable que siga una dieta equilibrada, practique ejercicio físico y que se aleje de vicios como puede ser el tabaco o el alcohol ya que estos sólo harán que el nivel de estrógenos disminuya de manera más rápida.

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