La enfermedad pulmonar obstructiva crónica o EPOC, tiene síntomas que te harán saber que puedes padecer esta afección y por tanto, que deberías ir al médico para que evalúen tu estado de salud actual.
Los síntomas
La falta de aliento es un síntomas común de los enfisemas pulmonares. Toser a menudo por culpa de la producción de moco y las silibancias al respirar también pueden ser síntomas claros. Si haces ejercicio y poco a poco te vas dando cuenta de que empieza a costarte más que antes realizarlo, también puede ser un síntoma claro.
El enfisema se desarrolla lentamente, por lo que quizá al principio no notes ningún síntoma de alarma o que no notes que te cuesta respirar. El deterioro de los pulmones es lento y puede pasar totalmente desapercibido. Si eres una persona fumadora y no sueles hacer mucho ejercicio, puede pasar más desapercibido el problema, pero cuando lo descubres, simplemente es porque el enfisema pulmonar ya está bastante avanzado.
Toser a menudo por culpa de la producción de moco son síntomas clarosUna persona que padece enfisema pulmonar puede sentir que le cuesta exhalar el aire de sus pulmones completamente, siente que el aire se queda atrapado en sus pulmones. También pueden darse cuenta que la distancia entre el pecho a la espalda está más pronunciada, esto es un efecto directo del aire que se queda atrapado detrás de las vías aéreas obstruidas.
Otros síntomas a tener en cuenta
Además de lo comentado más arriba, existen dos síntomas clave para darse cuenta del enfisema pulmonar que sería la dificultad para respirar y la tos crónica. Esto aparecerá en las primeras etapas del enfisema pulmonar. La persona sentirá que no puede respirar, que le cuesta un gran trabajo hacerlo.
Esto puede empezar cuando se hace esfuerzo físico, pero a medida que la enfermedad progresa, puede empezar a sentirse también durante los ratos de descanso. El enfisema y la EPOC se desarrollan a lo largo de varios años.
En las etapas posteriores, la persona puede tener:
- Tos crónica
- Dificultad para respirar
- Mucha mucosidad
- Silibancias
- Reducción del apetito
- Pérdida de peso
- Fatiga
- Labios azulados
- Ansiedad
- Depresión
- Problemas para dormir
- Dolores de cabeza
Si sientes otras afecciones será importante que acudas a tu médico lo antes posible para que evalúe el estado de tus pulmones.
Cómo saber que tienes un enfisema pulmonar
Si sospechas que tienes enfisema pulmonar deberás ir a tu médico para que te haga un examen físico. El profesional prestará atención a los sonidos que hagas al respirar, a cómo late tu corazón y a tu apariencia física en general. Así podrá hacerse una idea del alcance de la enfermedad y de cómo tienes la función pulmonar restante y la presencia de infecciones pulmonares.
Es posible que también te haga una radiografía en el tórax para identificar cambios que hayas podido tener en tu pulmón que puede indicar que tienes enfisema. Quizá también te haga hacerte unos rayos X también para mostrar si tienes infección o algún tumor que podría explicar los síntomas que estás padeciendo, ya que la falta de aliento puede tener otras muchas causas diferentes.
Las radiografías salen ser la prueba más rápida y fácil para empezar a separar las diferentes causas Las radiografías salen ser la prueba más rápida y fácil para empezar a separar las diferentes causas y poder tener un diagnóstico acertado. Es probable que también te haga respirar en un tubo conectado a una computadora para registrar la información necesaria para el diagnóstico. Estas pruebas miden la cantidad de aire que pueden contener tus pulmones, la velocidad con la que los pulmones expulsan el aire durante la expiración y la capacidad de reserva que tienes en los pulmones.
Si tienes antecedentes familiares también es posible que te haga un análisis de sangre para saber si tienes deficiencia de alfa-1-antitrispina, que es otra de las causas por las que se puede padecer enfisemas pulmonares. En el análisis también pueden verificar el recuento de glóbulos blancos que también pueden indicar una infección aguda. Las radiografías también pueden detectar la presencia de neumonía, bronquitis u otras afecciones respiratorias que podrían empeorar el enfisema pulmonar.
