¿Es mejor ducharse por la mañana o por la noche?. Los que defienden la primera postura indican que no hay mejor manera que empezar el día con una buena ducha. La ducha ayuda a activarte y te da energía suficiente para afrontar la jornada sin problema alguno. Por contra hay quienes abogan por ducharse antes de meterse en la cama. La ducha ayuda a relajar el organismo y permite que sea mucho más fácil el poder conciliar el sueño. En el siguiente artículo te mostramos cuándo resulta saludable ducharse y cuáles son los beneficios de la ducha.
La ducha es mucho mejor por la noche
La ducha va a depender en gran medida del trabajo que tenga la persona. Si la persona trabaja en una oficina no pasa nada por irse a la cama sin haberse duchado. Sin embargo si el trabajo de la persona es mucho más físico, es aconsejable el ducharse antes de irse a dormir.
Los expertos en el tema aconsejan en todo caso que es mucho más aconsejable el ducharse por la noche que por la mañana. La ducha tiene un efecto relajante bastante importante a la hora de poder descansar de una manera adecuada. Sin embargo es un consejo y no una obligación, por lo que cada persona es libre ducharse cuando lo crea conveniente.
El aspecto psicológico y mental de la ducha
Si se tiene en cuenta el aspecto psicológico, puede ser aconsejable el ducharse tanto por las mañana o por la noche. Una buena ducha permite al organismo activarse por lo que si la persona necesita estar atento en el trabajo, es preferible ducharse por la mañana.
A última hora del día, la ducha puede ayudar a relajarse y a equilibrar la temperatura del cuerpo. Es por ello que después de un largo y duro día de trabajo, los expertos aconsejan el pegarse una buena ducha. Si la persona tiene problemas a la hora de dormir, la ducha puede ayudar a conciliar mucho mejor el sueño.
Cómo debe ser la ducha
Desde el punto de vista de la salud se aconseja que la ducha no dure demasiado tiempo y con una temperatura no demasiado caliente. De esta manera la piel no sufre y se mantiene en perfecto estado. A la hora de secarse con la toalla, los expertos en el tema indican que no hay que frotarse y hacerlo de una manera suave.
El agua no debe estar demasiado caliente ya que la piel reseca en exceso. Aunque en los meses de invierno es algo complicado, se aconseja ducharse con agua fría ya que la misma ayuda a mejorar la circulación y a fortalecer el sistema inmunológico de la persona.
Con qué frecuencia hay que ducharse
No hace falta ducharse todos los días ya que de lo contrario la piel puede verse resentida. Todo va a depender de la actividad que se haga a lo largo del día. Ducharse más de la cuenta puede provocar que la protección del piel se ve dañada. Dicha protección protege a la piel de diferentes agentes externos como la polución o la contaminación. En el caso de ducharse todos los días, los expertos aconsejan hacerlo solo con agua y no usar jabón. Lo importante es el proteger el pH de la piel y no dañar la citada protección.
En definitiva, cada persona puede ducharse cuando lo considere oportuno. Es verdad que por la noche, la ducha tiene un efecto relajante que puede ayudar a la persona a dormir mucho mejor. Si la persona tiene un trabajo físico y suda con mucha facilidad es aconsejable el ducharse por la mañana. Lo importante a la hora de ducharse es el proteger en la medida de lo posible a la propia piel.