La anemia es una tipo de afección bastante habitual en una parte importante de la sociedad a causa de una importante disminución de la hemoglobina en los glóbulos rojos. La hemoglobina es una proteína rica en hierro encargada de llevar los glóbulos rojos de los pulmones al resto del cuerpo. Son muchas las personas que a día de hoy sufren de manera habitual este tipo de afección. Acto seguido te explicaré con más detalle las causas por las que una persona puede sufrir anemia y cuál es la mejor manera de tratarla.
Causas de la anemia
Las causas más evidentes por las que una persona puede padecer anemia son una pérdida importante de sangre debido a una hemorragia, una falta en la producción de glóbulos rojos y una destrucción excesiva de los glóbulos rojos. El organismo necesita diferentes tipos de nutrientes como es el caso del hierro o el ácido fólico para poder producir una buena cantidad de glóbulos rojos. La falta del propio hierro se puede deber a una alimentación desequilibrada y pobre del paciente, a una pérdida importante de sangre o a una cirugía en la que se extirpe una parte del estómago.
Otras causas que pueden provocar anemia en una persona son la ingesta de ciertos medicamentos que provocan que el organismo destruya una cantidad importante de glóbulos rojos. Ciertas enfermedades de tipo crónico como el cáncer o la artritis son otras causas por las que una persona pueda padecer anemia. Si la persona tiene problemas en el sistema inmunitario teniendo el mismo bastante débil es posible que pueda sufrir algún que otro episodio de anemia.
Síntomas de la anemia
Hay una serie de síntomas bastante evidentes y comunes de la anemia como son por ejemplo la fatiga, el cansancio, palpitaciones y mareos. En el caso de que la persona en cuestión sufra una anemia importante y severa es posible que tenga un fuerte dolor en el pecho, respiración alta, tensión arterial baja incluso puede llegar a sufrir una angina de pecho. Ante estos síntomas es muy importante acudir al hospital para evitar males mayores y la enfermedad pueda empeorar.
Cómo tratar la anemia
A la hora de tratar una enfermedad como la anemia hay que tener en cuenta la causa por la que se ha originado dicha anemia y la gravedad de la misma. Lo normal es que haya un cambio en la alimentación de la persona para que pueda recibir los nutrientes esenciales que el cuerpo necesita para producir un mayor número de glóbulos rojos.
El tratamiento puede consistir también en la ingesta de diversos suplementos nutricionales o fármacos con los que fortalecer todo el sistema inmunitario. El aumento en el consumo de hierro es esencial a la hora de tratar la anemia por lo que la persona debe aumentar el consumo de alimentos como las espinacas, las lentejas, los frutos secos o los cereales. En los casos más graves se puede llegar a realizar una intervención quirúrgica para realizar una transfusión de sangre y aumentar de esta forma el número de glóbulos rojos en el cuerpo.
Recuerda que la anemia es un problema de salud bastante importante y que hay tratar rápidamente. En los casos más graves el paciente puede llegar a sufrir un infarto y poner en grave riesgo su vida. En el caso de las mujeres embarazadas, la anemia puede incidir de manera negativa sobre el bebé ya que puede llegar a nacer con un peso más bajo de lo habitual. Si padeces anemia es esencial el acudir al médico de cabecera para que te realice un diagnóstico lo más exacto posible y puedas tratar eficazmente dicha anemia.