La primavera ya ha llegado y con ella numerosas alergias como es el caso de la del polen. Son muchas las personas las que padecen este tipo de alergia, en concreto unos 8 millones de la población. En cuanto a las previsiones, los expertos en el tema indican que ser tratará de una primavera algo más leve que otros años aunque la alergia puede ser algo más intensa en el sur de la península. En el siguiente artículo te hablamos de una manera más detallada de cómo será la primavera del 2023 para los que sufren alergia al polen.
Cómo será la primavera del 2023 para los alérgicos al polen
Los estudios señalan que en toda la zona cantábrica, en el litoral mediterráneo, en Navarra, en Castilla-León, en Castilla-La Mancha, en Granada, en Málaga y en Cádiz la primavera será leve por lo que la alergia no será muy acusada.
En Madrid, en Córdoba, en Sevilla, en Jaén o en Huelva la primavera será moderada y en provincias como Toledo, Badajoz o Cáceres la primavera será intensa.
¿Es bueno que llueva para rebajar los síntomas de la alergia al polen?
La lluvia puede afectar de una manera beneficiosa a los alérgicos al polen aunque también puede llegar a afectar de una manera perjudicial.
A corto plazo, la lluvia ayuda a aliviar y a reducir los síntomas propios de la alergia al polen. Sin embargo hay que indicar, que a largo plazo la lluvia favorece el crecimiento de las gramíneas y con ello el aumento de polen en el ambiente. El año pasado fue bastante cálido y con pocas lluvias, de ahí que la primavera de este año se considere leve en relación con la alergia al polen.
La influencia del cambio climático en las alergias al polen
No cabe duda que el cambio climático va a tener una influencia directa en las alergias al polen, provocando un aumento importante de las enfermedades alérgicas. Ello se debe a tres factores:
- Se produce un aumento importante de la concentración de polen. Los gases con efecto invernadero y el CO2 van a actuar como fertilizantes de las plantas. Esto hace que haya un mayor aumento de polen en las plantas.
- Las personas están expuestas más tiempo al polen de las plantas. Ello se debe al aumento de las temperaturas que sufre todo el planeta.
- Se trata de un polen mucho más agresivo que el de años atrás. La contaminación presente en las ciudades hace que las plantas elaboren un tipo de polen mucho más potente y agresivo que el que se produce en las zonas rurales. Es por ello que en las grandes ciudades haya mucho más casos de alergia que en el campo.
Los efectos del cambio climático son tan importantes que diversos estudios indican que a finales de siglo, las emisiones de polen podrían llegar a darse un mes antes de la llegada de la primavera. Ello provocaría que la temporada fuerte de la alergia al polen aumentaría en casi un mes con respecto al tiempo actual.
Además de todo esto, el aumento de las temperaturas unido a un mayor concentración de CO2 en el ambiente, provocaría un aumento considerable en la cantidad del polen. Todo ello hará que una mayor parte de la población sufra la temida alergia al polen.
En definitiva, según los estudios durante este año la alergia al polen vendrá con menos fuerza que en años anteriores. Sin embargo hay zonas de España como es el caso de Extremadura en la que la alergia será bastante intensa. De cualquier manera, los efectos del cambio climático van a tener una incidencia directa en las enfermedades alérgicas provocando un mayor aumento en los próximos años.