Si tienes las hormonas equilibradas en tu organismo tendrás una mejor salud y te sentirás bien. Si quieres seguir un estilo de vida vegano, quizá te hagas la siguiente pregunta: ¿podría una dieta vegana ayudarte a encontrar el mejor equilibrio?
Independientemente de cuánto sabemos sobre las hormonas, sabemos que, cuando se trata de cambios rápidos en nuestro estado de ánimo, energía y peso, ¡estos pequeños mensajeros químicos especiales son los culpables en todo momento! Una deficiencia o un desequilibrio tiene un impacto mucho mayor en cómo funcionamos de lo que nos gustaría. Un cambio en la dieta es la solución más efectiva para este problema si no estás dispuesto a gastar miles de euros en vitaminas, suplementos o medicamentos. Si eres vegano, sigue estos consejos.
Evitar los antibióticos en la carne
Se dice que la mayoría de los animales son alimentados con pienso modificado genéticamente, ya que es una opción mucho más barata para los agricultores. También se les puede administrar antibióticos para prevenir ciertas enfermedades. Al elegir una dieta sin carne, estás evitando el consumo de estas sustancias que pueden causar estragos en tus hormonas.

Evitar productos lácteos ricos en estrógeno
Para maximizar la cantidad de productos lácteos producidos en las granjas comerciales, las vacas se mantienen embarazadas, lo que lleva a un gran aumento en sus niveles de estrógeno. El estrógeno adicional es algo que las mujeres no pueden hacer si quieren mantener cualquier forma de equilibrio hormonal. Por lo tanto, omitir la leche es buena idea en las mujeres para evitar esa carga hormonal extra.
La soja es buena
La soja contiene fitoestrógenos, un compuesto natural que se encuentra en las plantas que imitan el estrógeno real y sirve como un tipo de terapia de reemplazo hormonal natural para quienes la necesitan.
Además de estimular el equilibrio hormonal, pueden ayudar efectivamente a reducir los sofocos, proporcionar alivio menstrual y prevenir la osteoporosis.
Los vegetales te ayudan a eliminar toxinas
Muchas de las verduras que comes como el brócoli, la col rizada o el repollo tienen grandes cantidades de glucosinolatos. Los glucosinolatos apoyan el proceso de desintoxicación del hígado. Esto permite que el cuerpo se deshaga de toxinas y hormonas. También tiene un efecto de equilibrio sobre los niveles de estrógeno.
Comportamiento sexual
Otro compuesto ingenioso que se encuentra en productos vegetales como las semillas de lino, sésamo o girasol, son los lignanos. Estos fitoestrógenos en realidad tienen la capacidad de aumentar y disminuir los niveles de estrógeno dependiendo de lo que tu cuerpo necesita en ese momento. También se sabe que ayudan a mejorar los síntomas de la menopausia y la osteoporosis.

Deja a un lado las grasas malas
Olvídate de las grasas malas para siempre y encuentra el beneficio de las grasas buenas para mejorar tu salud en todos los aspectos. Los ácidos grasos son los componentes básicos de nuestras hormonas, pero las grasas trans que se encuentran en los alimentos procesados pueden provocar un desequilibrio.
Las alternativas saludables a la grasa, como los aguacates, son excelentes para reducir el colesterol y equilibrar el cortisol, nuestra hormona del "estrés". El coco es otra grasa beneficiosa para el cuerpo, con propiedades antibacterianas y que estimulan el metabolismo. ¡Y todos estos alimentos son bienvenidos en una dieta vegetariana o vegana!
¿Te gustan las bayas?
Las bayas se consideran súper alimentos cuando se trata de sus capacidades de equilibrio hormonal. También tienen una carga glucémica baja, lo que significa que no experimentarás un aumento repentino de glucosa en la sangre, lo que permitirá el equilibrio hormonal. Además, también te ayudará a disminuir los niveles de azúcar en la sangre y promover la resistencia a la insulina . En su lugar, ayudan a disminuir los niveles de azúcar en la sangre y promueven la resistencia a la insulina. Además, las bayas reducen la hormona del cortisol, por lo que si tienes un día estresante... ¡come un puñado de ellas!