Remedios naturales para la hernia discal

La columna vertebral está formada por unos huesos llamado vértebras y unos discos que están entre ellas que les permite a las personas poder moverse y agacharse libremente sin sentir dolor. Cuando uno de estos discos sufre una lesión y se escapa de entre las dos vértebras, provoca una presión en los nervios de alrededor de la espina dorsal que recibe el nombre de hernia. La hernia fiscal es más frecuente en la cervical o en el lumbar debido a que estas son las zonas con mayor movilidad de la columna vertebral, sin embargo, una hernia discal puede surgir en cualquier segmento de la columna.

La hernia discal es un problema de salud muy frecuente actualmente, según los expertos una de cada cien personas adultas padecerá de este problema y al menos el 50% de la población sufrirá algún tipo de lesión o problema de espaldas a lo largo de su vida. No obstante, no todas las hernias discales producen dolor, de hecho, se calcula que alrededor del 30% de la población podría tener una hernia sin que se manifieste ningún síntoma.

Síntomas de la hernia discal

El mayor síntoma de la hernia fiscal es el dolor, y es que la presión en estos nervios puede provocar dolor en toda la espalda e incluso por la pierna y el pie. Acciones cotidianas como caminar, toser, estornudar e incluso estar sentados puede provocar un dolor severo llegando a incluso a no poder dormir debido a este fuerte dolor. Por otro lado, las lumbalgias repetitivas pueden ser un aviso de hernia discal.

De igual forma, los síntomas de una hernia discal cervical son básicamente los mismos, dolor, pero esta vez en la zona cervical, especialmente en la parte posterior o lateral, también se puede llegar a tener dolor en los hombros, los brazos y en ocasiones los dedos e incluso el tórax. Así mismo, toser, reír o hablar puede provocar también mucho dolor en las personas que sufran una hernia discal.

Remedios naturales para una hernia discal

Antes que nada, lo mejor para tratar una hernia discal es mantener una vida sana, comiendo adecuadamente y realizando ejercicios como el yoga, Pilates o la natación para mantener flexible la columna vertebral. Pero sin duda es mejor prevenir que curar y una de las mejores formas de prevenir (y de desinflamar) una hernia discal es mediante la nutrición.

Toma dos litros de agua diarios: Es de vital importancia tomar la suficiente cantidad de agua diaria. Lo recomendable es que un adulto tome entre un litro y medio y dos litros de agua cada día y en el caso de sufrir una hernia discal o querer prevenirla, esto será de gran ayuda ya que el tener el cuerpo hidratado protege los discos intervertebrales y reduce la inflamación si hay una hernia discal.

Cuida la alimentación: Aunque la alimentación por sí sola no corrija una hernia discal, si que afecta mucho a que los síntomas de esta mejoren o empeoren. Tener una dieta basada en frutas, vegetales, cereales integrales y todo tipo de alimentos antioxidantes, será muy beneficioso para nuestra salud ya que ayudará al fortalecimiento de nuestros huesos. De igual forma hay algunos alimentos que debemos evitar como aquellos que contengan elementos acidificantes o inflamatorios como son las carnes rojas, el azúcar, todos los alimentos que contengan conservantes o colorantes, los que contengan gluten y la llamada "comida chatarra", entre otros.

La fisioterapia y la quiropraxis: La fisioterapia es uno de los tratamientos más usados para tratar las hernias discales. Cuando se acude a un fisioterapeuta a parte de tener sesiones con él, es frecuente que se le mande al paciente a realizar algunos ejercicios en casa que estarán amoldados a sus necesidades y que serán muy beneficiosos para esta afección De igual forma, es común que se empleen medidas más caseras como la aplicación de frío, calor, o ambos, en la zona en la que se presentan molestias o dolor para aliviar la inflamación.

Otro tratamiento muy efectivo para la hernia discal es la quiropraxis. Un buen quiropráctico puede incluso ser capaz de corregir una hernia discal, bien sea cervical o lumbar. El fin de esta práctica es que la vértebra reabsorba el tejido y la hernia se cure completamente. En las primeras sesiones es una medida muy eficaz contra el dolor. Sin embargo, hay que añadir que esto solo lo puede realizar un buen quiropráctico ya que ponerse en manos de una persona que no esté verdaderamente formado en la quiropraxis puede provocar no solo que la hernia empeore sino que se produzcan otros problemas incluso más graves.

La fitoterapia: Hay algunas plantas medicinales que se pueden tomar en infusión y que ayudan a tratar los síntomas de una hernia discal. Estas plantas, reducen la inflamación y el dolor. Una de las más eficaces es la infusión de tomillo, orégano y cola de caballo que en conjunto tienen un efecto antiinflamatorio que resulta beneficioso sobre esta condición.

Infusión de tomillo, orégano y cola de caballo. Esta infusión calmará los dolores de hernia, especialmente los cervicales al ser anti-infecciosa, anti-inflamatoria y astringente. Para prepararla solo tendrás que usar medio litro de agua, una pizca de tomillo, otra de orégano y otra de cola de caballo. Todos estos ingredientes tendrás que hervirlos a fuego lento durante cinco minutos y dejarlos reposar durante unos minutos, una vez hecho esto cuela la infusión y tómala templada tres veces al día antes de cada comida.

Infusión de raíz de harpagofito o de corteza de sauce blanco: Prepara una infusión hirviendo un par de cucharadas de esta raíz o de corteza de sauce blanco y toma dos tazas de este remedio natural para la hernia discal al día antes de cada comida.

Hay muchas otras plantas que se pueden tomar en infusiones que ayudan a reducir el dolor y a aliviar la hinchazón pero hay que recordar que nada de esto sustituye la consulta y revisión médica por lo que estar en contacto con un profesional que lleve un seguimiento de esta afección será de vital importancia para que los síntomas de la hernia discal disminuyan.